EQUIDAD SOCIAL Y ARQUITECTURA

Este título, muy genérico respecto al tema principal "Arquitectura y medio ambiente" de este apartado, dependiendo del enfoque con el que cada uno lo trate dará un contenido diferente.

Juzgando esta cuestión con criterios basados en nuestra "materialista filosofía del mundo y de la vida", de cuya influencia el comportamiento y actividades del hombre contemporáneo no está guiado con la Idea Subyacente del Supuesto Creador de nuestro Mundo, que es Amor Puro y Universal, sino de su idea particular que por ser ahora errónea ha adulterado la naturaleza de este Amor Puro y universal en un amor egocéntrico que le hace difícil para el hombre actuar de manera natural en justicia y bondad, ha surgido la necesidad de introducir leyes jurídicas, para sus comportamientos y actividades.

Este pobre sustituto del Amor interior de carácter universal que poseen los animales, sólo podría frenar un poco el comportamiento egoísta del hombre, siendo esto la razón de que tener una verdadera equidad social hoy es una utopía, y sólo existe en las Constituciones de los distintos gobiernos sobre los derechos humanos, pero en la realidad, lo que decide la suerte del desarrollo de la arquitectura es la salvaje lucha económica entre los intereses creados, en los que no hay cabida a la equidad social, dejando su huella negativa en el desarrollo de nuestros asentamientos humanos que son las definitivas formas de los edificios singulares que se realizaron a lo largo del tiempo aisladamente de su medio ambiente construido con el fin de explotar el mercado.

En esta situación, en las zonas privilegiadas, si los solares sirven para oficinas o de negocio, nacen rascacielos y se permiten altas densidades y altos coeficientes de volúmenes y si son para residencia se proyectan bloques abiertos con bajos coeficientes de volúmenes, permitiendo crear amplios espacios recreativos a su alrededor o construir viviendas unifamiliares en parcelas aisladas, mientras en las zonas deterioradas y malsanas, se construyen en bloques altos cerrados o abiertos de viviendas con un mínimo de superficie y de malas calidades, con densidades y coeficientes de volúmenes muy altos para familias con poca adquisición económica.

Este gran contraste de aspecto tan diferente de arquitectura no justificado por razones estéticas, se presenta más negativamente cuando por el crecimiento y expansión arbitraria de las ciudades vecinales se fusionan en una aglomeración indefinida, mezclando las zonas anteriormente céntricas o periféricas de cada ciudad en una unidad laberíntica, que es la escena de nuestras Metro y Megaciudades en las que en un diámetro de 50-80 Km. se han perdido 30-60 ciudades y poblados existentes.

Respetar la equidad social y crear una arquitectura que refleja esto, sólo se puede realizar si este gesto de fraternidad hacia los hombres sale de manera natural y espontánea desde dentro de los constructores y promotores de las mismas, que como intentaba demostrarlo sólo puede si los hombres de la sociedad donde se realizan estas obras logran establecer el perfecto estado de su naturaleza psico-somática y expresar esto en su correspondiente "filosofía del mundo y de la vida" compartida por todos. Objetivo, que en nuestra situación desesperante tiene que ser la   tarea más importante y lo que, por el papel que la arquitectura desempeña en nuestra vida, tiene que empezar los arquitectos, cuyas misiones son las de proyectar nuestros edificios y ciudades.

Empero, si algunos de nosotros logran alcanzar este perfecto estado de su naturaleza y plasmar sus ideas en sus correspondientes soluciones arquitectónicas, esto aún no será suficiente para el éxito, porque mientras no difundan y compartan sus ideologías entre el resto de la población del mundo, sus ideas y soluciones propuestas no se realizarán y quedarían en el olvido.

Madrid, 16 de Octubre de 1013

Francisco Z. Lantos

Doctor Arquitecto