HOMBRE

   En una sociedad en decadencia, como es la nuestra, donde reinan los débiles, ser robusto y sano, fuerte, original e inteligente está mal visto; por eso, un hombre que reune estas condiciones es tachado como machista, y si quiere prospera dentro de esta sociedad tiene que esconder estos valores y aceptar las opiniones de la mayoría, que es lo que cuenta en las democracias. En estas circunstancias, para conocer la Verdad sobre la real naturaleza y carácter del hombre, como no nos sirven ni el comportamiento humano ni sus argumentos, tenemos que observar la naturaleza de los otros seres animados, los cuales, por poseer sólo vida instintiva, se comportan naturalmente y nos presentan información veredicto de nuestra parte biológica en la que coincidimos con ellos. Esta observación nos demostrará que en cada caso hay una gran diferencia entre la naturaleza de la hembra y del macho, y esta deferencia está basada en hechos biológicos y fisiológicos, y en el caso del ser humano incluso existe también psicológicos entre el hombre y la mujer, y consecuentemente es un error querer igualar estas diferencias y pretender cambiar las actividades desarrolladas y practicadas a lo largo de la historia del comportamiento humano, porque los costumbres no se establecen al azar o por la decisión de unos hombres o mujeres sino que finalmente son resultados de una fuerza mayor que siempre expresa el carácter y naturaleza de cada especie.